★ ★ ★ ½ | Por Fer Assad

Godzilla vs. Kong, dirigida por Adam Wingard, es uno de los estrenos más esperados después de formar parte de la primer ola de retrasos cinematográficos debido a la pandemia. Su estreno fue pospuesto en cuatro ocasiones durante 2020 y finalmente empujado por Warner Bros. Pictures hasta el 24 de marzo de 2021.

El épico episodio de batalla entre los dos colosos es de inmensas proporciones en todos los sentidos: GRANDES efectos, GRANDES titanes y lo más importante GRANDES MADRAZOS.


Todo inicia después de que Godzilla reaparece, pero inexplicablemente comienza a atacar a los humanos, llamando la atención de los expertos que estudian a los titanes pues se considera un comportamiento raro en “Gojira”, quien suele encenderse solo bajo la presencia de un alfa que amenace su lugar en el trono como Rey de los Monstruos.

Godzilla vs. Kong es la cuarta película del llamado “Monsterverso” y es, junto con Kong: La Isla Calavera, una de las mejores cintas de la franquicia. A diferencia de Kong, en donde tuvimos grandes actuaciones y protagonismo en sus personajes humanos, en Godzilla vs. Kong son los monstruos quienes ostentan el estrellato y el mayor tiempo en pantalla.

A pesar de ser una de las experiencias más entretenidas desde los inicios de la pandemia, la película no está libre de fallas: (1) una trama fácil de predecir que parece busca satisfacer los deseos de su audiencia y de los fanáticos de los monstruos clásicos y (2) personajes humanos que, además de ser demasiados, son todos innecesarios, sin desarrollo. En mi opinión pudieron haber sido totalmente omitidos. La película tiene muchos nombres populares a los que no les sacan provecho, como Alexander Skarsgård, Millie Bobby Brown, Rebecca Hall, Eiza González, Kyle Chandler y Demián Bichir.


El verdadero acierto y éxito de la película es la monstruosa batalla. No faltan los momentos de golpes. Esto es lo que todos queremos ver cuando compramos un boleto para un filme titulado Godzilla vs. Kong. Por esa razón, puedo decir que se trata de una película totalmente recomendable y que vale la pena vivir como experiencia en las salas de cine. Solo así podrás disfrutar de esta épica pelea como se debe. Es en serio, este filme está hecho para la gran pantalla y debe ser disfrutado en la gran pantalla, es justo lo que necesitamos después de un año repleto de carencias en películas de gran escala en las salas de cine.

¿Quién ganará la batalla? Esto no lo revelaré. No pierdas la oportunidad y compra ya tus boletos para vivir esta épica pelea como debe de ser.