★ ★ ★ | Por Arturo Garibay
El melodrama oncológico MIENTRAS ESTÉ VIVO es el más reciente largometraje de Emmanuelle Bercot, quien nos receta un derroche de emociones sobre el marchitar de la vida y la impotencia ante lo inevitable. La pieza reúne a la cineasta con las dos estrellas de Con la frente en alto (2015), que sigue siendo uno de sus mejores largometrajes como realizadora.
MIENTRAS ESTÉ VIVO es protagonizada por un Benôit Magimel en el tono perfecto que exige el relato, acompañado de la infalible Catherine Deneuve y una solvente Cécile de France. Es el elenco, en todo caso, el pretexto perfecto para ver esta película que revolcará tu estado de ánimo y te fulminará. En serio, si eres junkie del drama, esta película te dará la dosis que buscas.
Un profesor de actuación (Magimel) padece de un cáncer que, le han confirmado los médicos, es incurable. El tiempo se le agota. Es así que, acompañado por su madre (Deneuve), llega a una clínica donde le ofrecen hacer más llevadera y menos tortuosa la recta final de su vida.
Ciertamente, MIENTRAS ESTÉ VIVO se ofrece como un eficiente melodrama sobre el cáncer y el adelgacamiento de la vida cuando es succionada por esta atroz enfermedad. Empero, es justo insistir en que el filme exprime su faz más trágica y dolorosa… Y creo que lo hace así en su afán por educarnos a todos sobre el dolor del cáncer terminal.
Es precisamente ese “valor” aleccionador lo que me ha sacado de la película un más de una ocasión mientras la veía. El lado formativo de la cinta se ejecuta con tanto descaro —un desacierto de guion y/o dirección, vaya uno a saber— que hasta puede resultar chocante. Por instantes no sabe uno si está viendo una película o un video instruccional.
En este contexto, vale la pena hacer notar que la película incorpora a su elenco a un médico real: un doctor llamado Gabriel Sara hace el papel del galeno que atiene al personaje de Magimel. El médico tiene, hay que decirlo, bastante carisma a cuadro y nos vende su actuación muy bien. Pero… ¿la película necesitaba de un médico real para probar su punto? Mmmm. No, francamente no.
Interesante resulta la forma en la que la cineasta integra recursos como la educación actoral o la música terapéutica al entramado del relato. Ambos abonan a la visión de Bercot: La línea argumental del actor (recordemos que Magimel hace el papel de un profe de actuación) nos sirve para que el personaje evalúe, de cara a su sino fatal, su relación con los otros, la idea de la “presencia” y las emociones como algo más que materia prima. A su vez, el recurso musical sirve como válvula de escape mientras navegamos por una historia abrumadora.
En este punto ya debes tenerlo claro: si lo tuyo son esos dramones que te taladran con sentimientos exacerbados, eres el público de MIENTRAS ESTÉ VIVO. Ni lo dudes.
MIENTRAS ESTÉ VIVO fue seleccionada como parte del 25 ° Tour de Cine Francés. Un estreno de Nueva Era Films.
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Una crítica de Arturo Garibay para TOPCINEMA.
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