★ ★ ★ ★ | Por Arturo Garibay
PUSH es el documental que había estado buscando, casi sin saberlo. Ya antes —en conversaciones entre amigos— había intentado expresar con palabras lo que dice con claridad este largometraje, pero siempre me quedaba corto. El filme, certero y pertinente, nos pone frente a una problemática que vemos todos los días pero a la que le desviamos la mirada: cómo el sistema financiero, los gobiernos y la voracidad inmobiliaria han machacado el derecho de todos a tener una vivienda digna. Qué película. La cámara del sueco Fredrik Gertten nos emplaza de cara a una crisis de derechos humanos sin parangón.
De Chile a Corea del Sur, pasando por Brasil, Canadá, Estados Unidos, Alemania, Suecia o el Reino Unido, el derecho fundamental a tener un hogar propio ha sido tomado como rehén. Pero, ¿por quién o qué? La respuesta es mucho compleja. Allende la gula inmobiliaria, PUSH nos invita a reflexionar sobre la lujuria económica del mercado financiero (el documental hace una analogía interesante al comparar al mercado con una industria extractivista, como la minería) y descubrir cómo hemos permitido que la vivienda se convierta en una ostentación, una mercancía suntuosa o un artículo de lujo, en vez de un bien de primera necesidad, al alcance de todos.
Como documental social, PUSH es una suerte de película de terror. Al menos a mí me lo ha parecido. El filme sigue a nuestra scream queen del activismo, decidida a llegar al final del recorrido en una pieza y sin desmoronarse: Leilani Farha, quien al momento del rodaje era Relatora Especial en Vivienda por la ONU y que actualmente dirige The Shift, un organismo de lucha social a favor de asegurar que todos puedan tener acceso a un hogar, con justicia, igualdad y seguridad.
Del desalojo al acoso violento, de la destrucción y la rapiña, PUSH es una historia donde los seres humanos comunes deben enfrentar a inversionistas carroñeros invisibles y a los acaparadores de inmuebles; si pensabas que la gentrificación era la culpable de todo, solo estabas viendo la punta del iceberg. Las diásporas forzadas por la gentrificación son tan solo la chispa, y siento que hay una potente carga de trinitrotolueno esperando al final de la mecha. Y bueno, nuestras ciudades, nuestros barrios y nuestras garantías están siendo tomadas como rehenes.
PUSH ayuda a ilustrar y dimensionar una problemática que se ha desbordado. Lo que representa esta crisis en términos económicos y, sobre todo, en términos de injusticia social, es titánico. Absurdo. Insultante. Una obscenidad muy, muy mortificante. El sistema finaciero es una manada de pirañas que se las ha apañado para hacer que los gobiernos arrojen el derecho a la vivienda directo a sus fauces… para entonces construir una tonta burbuja de exhuberancia económica.
Ganadora del Premio del Jurado en DocsMx, del premio del jurado joven en DocsBarcelona y del premio del jurado Open Eyes en el Festival Internacional de Cine de Derechos Humanos de Nuremberg, PUSH es una pieza de visionado obligado, un largometraje documental importante e imperativo.
PUSH es un estreno de Mandarina Cine. Ya en cines seleccionados.
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Crítica por Arturo Garibay para TOPCINEMA
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