Aunque a muchos les encante negarlo, la monogamia no siempre fue la norma. Nuestros antepasados mantenían naturalmente relaciones hoy conocidas como “poliamorosas”. El motivo y momento preciso en el que la humanidad dejó la tendencia de tener a varias parejas simultáneas sigue siendo un misterio. Lo cierto es que la costumbre de enamorarnos de una persona y permanecer juntos hasta que la muerte nos separe no siempre existió. A pesar de eso, en la actualidad, para muchas culturas participar en una relación poliamor es enfrentarse a múltiples estigmas sociales. 

El largometraje PETIT MAL (2022) pasó por el Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG 37) tras su estreno en el Festival de Tribeca. Basada en la vida de la directora Ruth Caudeli (¿Cómo te llamas?, Segunda Estrella a la Derecha), la película se aleja del morbo y los clichés con los que la industria ha explotado el tema del poliamor por años. 

Ruth Caudeli rompe la fórmula, muestra la capacidad de amar sin límites y combate la falta de representación genuina del amor entre mujeres. Lejos de contar la historia de cómo se conoce la “trieja” —Martina (Silvia Varón), Laia (Ruth Caudeli) y Anto (Ana María Otálora)—, nos permite ser testigos de una parte de su relación sentimental; abriendo las puertas de su casa y desnudando sus emociones ante la audiencia que se vuelve testigo de las alegrías, las ausencias y la lucha por mantener el equilibrio. 

PETIT MAL se siente tan honesta, que por primera vez pude ver en pantalla la posibilidad de un amor bonito entre más de dos personas al mismo tiempo sin romantizar la idea.

Ana María Otálora, Ruth Caudeli y Silvia Varón.

Las chicas detrás de PETIT MAL visitaron la Cineteca de Guadalajara en el margen del FICG 37. En TOPCINEMA no pudimos dejar pasar la oportunidad de charlar con la “trieja”: 

¿De dónde viene la inspiración para PETIT MAL?

RUTH CAUDELI: PETIT MAL parte de un momento que nos tocó vivir, en el cual, una de las tres tuvo que ausentarse y de relacionarnos como “trieja” en nuestra relación sentimental, pasamos a ser dos y tuvimos que reformular nuestra forma de relacionarnos. Es un momento que pasamos en nuestra vida, pero que decidimos ficcionarlo. Es decir, todo estuvo “guionizado”, todo estuvo escrito y nos gusta llamarlo como un eco de ese momento de nuestra vida. 

¿Cómo es para ustedes el formar una “trieja”? 

SILVIA VARÓN: Yo estoy muy feliz. Encontré una manera de relacionarme que me hacía falta y que necesitaba. Al tener una relación poliamorosa tienes más espacio para ti misma, aunque parezca que no porque somos más, eso también te da más espacio de ser tú. Yo se lo recomiendo a todo el mundo… estás rodeada de amor todo el tiempo. 

ANA OTÁLORA: Es una libertad absoluta, es concebir el amor desde otro lado, más libre con mucho apoyo. Yo soy el “unicornio”, la persona que llega a formar parte de una relación; las chicas ya llevaban tiempo juntas – unos 10 años – y venía de una relación tormentosa. Encontrarme con estas chicas que admiro y que amo fue maravilloso, es apoyo por lado y lado y  amor por lado y lado.

¿Cómo ha sido el mostrarse como “trieja” en una sociedad conservadora como Colombia?

RC: La sociedad siempre te va a poner trabas, te va a poner barreras, va a intentar poner límites, creo que las tres hemos intentado vivir nuestra vida sin importar esos límites.

SV: Es que te valga madre, como dicen ustedes, ¡que te valga madre! Si quieres pensar mal, piensa lo que quieras, no voy a dejar de vivir mi vida.


PETIT MAL es una producción de Ovella Blava Films

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Texto por Esclavo del Pop
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