La hermana Ofelia (María Evoli) llega a un pequeño pueblo sin imaginar los horrores que le esperan. Ni bien se pone al servicio del padre Víctor (Julio Bracho), tiene que afrontar un reto inesperado: una mujer embarazada parece haber sido poseída por un mal inconmensurable. Ofelia hace todo a su alcance por expulsar dicha maldad, pero su aventura demoniaca apenas comienza.
LA EXORCISTA es la película mexicana de terror dirigida por Adrián García Bogliano. El realizador comparte los créditos como guionista con Christian Cueva y Ricardo Farías, quienes sembraron la semilla de esta película que se atreve a lo impesable: que una mujer practique un exorcismo, algo prohibido por la iglesia.
En coincidencia con el estreno del filme, Cueva y Farías charlaron con TOPCINEMA sobre el proceso de escritura de este largometraje que se circunscribe a la gran —y aterradora— tradición del cine de exorcismos.
«Al escribir la película pensamos qué pasaría si intentamos contar una historia de exorcismos pero que inicia donde todas las películas del género terminan», reflexiona Ricardo Farías. «El primer acto de la peli es precisamente ese exorcismo que normalmente ves hasta el final de las películas. Nuestro reto narrativo era pensar en el ‘después qué sigue’ para darle sentido a la historia».
«Recuerdo que nos leímos todos los libros de exorcismos, el Malleus maleficarum, en fin; queríamos saber todo sobre los exorcismos desde el punto de vista del Vaticano, desde el punto de vista del canon», agrega. «El peor sacrilegio de la película es que es una monja, una mujer, la que hace el exorcismo, algo impensable».
Por su lado, Christian Cueva afirma que para el equipo de guionistas «era muy importante respetar el canon; pero también tengo que decir que la idea [de LA EXORCISTA] surge de combinar EL EXORCISTA con TIBURÓN. Queríamos contar una historia clásica de posesiones, combinándola con la emoción de una película de acción».
Cueva y Farías relatan también que LA EXORCISTA fue un gran espacio de enseñanza sobre el proceso de co-escritura: «En el camino aprender que lo importante no es que las ideas de uno prevalezcan, sino que todos los involucrados tenemos que pensar siempre qué es lo mejor para la historia», apunta Ricardo.
«En un proceso de escritura colaborativa, más que rigidez, tiene que haber orden», concluye Cueva. «Una vez que uno tiene clara la estructura de la película, el reto es tratar de hacer que la siguiente escena sea mejor, que la siguiente escena dé más miedo».
LA EXORCISTA ya está en salas de cine y es un estreno de Star Distribution.
Texto por Arturo Garibay para TOPCINEMA
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