Alejandro Aquino, escritor, músico e historiador, llega con un proyecto literario singular: ¿Qué toca hoy, Sócrates? Las memorias de Mauricio Garcés dictadas a su mayordomo, un libro que combina investigación rigurosa, «ficción» juguetona y un decidido homenaje a una de las figuras más icónicas en la cultura popular mexicana. El volumen, publicado de manera independiente, recupera la vida y legado del actor a partir de un dispositivo narrativo inesperado: Sócrates, un mayordomo encargado de organizar citas, cuidar el estilo del protagonista y, además, escribir un libro que aspire a superar las memorias de Casanova.
Aquino explica que la idea nació desde un lugar profundamente emocional: el filtro nostálgico con el que recuerda las películas filmadas en los años sesenta y setenta. Autos, muebles, colores y texturas son, para él, parte de su infancia, de aquellas tardes en las que la programación televisiva ofrecía una mezcla de cine nacional, desde Pedro Infante hasta el eterno seductor Garcés. Ese “filtro” se convirtió, con los años, en territorio fértil para un proyecto que conjugara su formación como historiador, su pasión por la música y su fascinación por el pasado. Al descubrir que no existía un libro que hiciera verdadera justicia al actor, decidió construir uno desde la libertad literaria.
APROXIMARSE AL MITO GARCÉS
Aquino partió de una necesidad clara: recuperar toda la trayectoria de Mauricio Garcés, más allá de los títulos de culto o las frases célebres que han sobrevivido por décadas. El autor le da a su libro una libertad que una biografía estrictamente documental no permitiría. Sócrates aparece así como un recurso que permite dialogar con un “Mauricio” ficticio pero construido a partir del icino, un hombre que en el texto puede ser lúcido y decadente a la vez, preocupado por su carrera, por el paso del tiempo y por ese personaje público que terminó, de cierto modo, devorando al hombre que lo interpretaba.
Aquino detalla: “Cuando llegué a la idea de hacer un libro de Mauricio Garcés, sentí que no se le había hecho justicia y que todavía había una oportunidad de contar su historia de otro modo y sobre todo, de explorar el tipo de humor que lo distinguió, así que decidí hacerlo de una forma literaria.”
El autor encontró también en este dispositivo narrativo un modo de rendir tributo a un cuerpo de trabajo mucho más amplio de lo que la memoria colectiva reconoce. Teatral, televisiva, cinematográfica: la filmografía de Garcés es prolífica y, vista en conjunto, revela una evolución creativa, distintos periodos y múltiples colaboraciones. Aquino aprovecha el libro para subrayar la red de talentos de Mauricio y para recobrar una época completa, la de un México modernizador, estilizado y aspiracional que hoy sigue resonando en el imaginario colectivo.
“Hablar de Mauricio Garcés pues no solamente es hablar de este seductor, galán, conquistador… sino de arquitectura, de autos, de moda”, reflexiona el autor.
Ese fenómeno cultural es, de hecho, uno de los ejes de la investigación del autor: ¿por qué Garcés, a diferencia de tantos galanes cinematográficos, trascendió a su propio tiempo? Aquino sostiene que el secreto está en que su comicidad no ha sido reemplazada. “Yo creo que es uno de los cómicos que su lugar no ha sido ocupado; no hay ningún actor, ningún cómico que haya hecho un papel similar con éxito.” En efecto, nadie posee la galantería, ironía y el estereotipo preciso del seductor mexicano, sólo Garcés. En ese sentido, comparte una peculiar herencia cultural con figuras como Don Ramón Valdez, pues «ambos son personajes cuya energía cómica es tan específica que resulta irrepetible», afirma Aquino.
UN LIBRO QUE MEZCLA RIGOR Y FANTASÍA
Si bien el proyecto tiene un fuerte componente recreativo, Aquino trabajó con una metodología estricta, hasta volverse un «completista» del actor. “Me aventé todas las películas de Mauricio Garcés… las 62 oficiales y las otras 6 donde aparece en cameo; eran 68 en total.” Esto lo hizo para analizar repeticiones, variaciones y momentos clave de su evolución actoral. Llevar una carpeta de observaciones fue indispensable, especialmente en la etapa de su carrera en la que los filmes repetían fórmulas, situaciones y chistes, un reflejo del ritmo industrial con el que el cine mexicano producía comedias en esa época.
Ese análisis detallado le permitió identificar la forma en que Garcés fue construyendo su propio personaje a fuerza de improvisación. «Muchas de las frases que se consideran parte de un guion realmente fueron ocurrencias que Mauricio ya incluía en producciones donde aparecía como secundario. Su estilo nació en la práctica: frases, tics, poses y modulaciones que, con el tiempo, se convirtieron en sello personal».
La investigación no se limitó al visionado de películas. Aquino rastreó entrevistas en hemerotecas para conocer cómo el propio actor percibía sus trabajos al momento de estrenarlos, así como la reacción crítica. Esa mirada histórica contrasta con el mito contemporáneo: algunas cintas que en su estreno recibieron duras críticas hoy son consideradas auténticos clásicos populares.
Pero más allá del rigor documental, el autor quería que la novela mantuviera una cualidad lúdica y fantasiosa. Por eso cada capítulo funciona como una “escena” donde Sócrates enfrenta una circunstancia distinta: hablar del teatro, del western, del terror; explorar la vida familiar de Garcés; o encontrarse con personajes que el actor interpretó en pantalla. El libro juega a que esos personajes se confunden con la identidad real del actor, tal como ocurrió fuera de la ficción: el público terminó convencido de que Mauricio Garcés y Mauricio Feres Yazbek eran la misma persona.
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- Alejandro Aquino, autor del libro
PUBLICAR DESDE LA INDEPENDENCIA
Otro componente fundamental del proyecto es su carácter independiente. Aquino ha transitado ese camino tanto en la música como en la literatura. «¿Qué te digo? Publicar mi propio libro implicó asumir el control total, eso está bueno —desde la edición hasta la distribución—, pero también implica enfrentar las desventajas logísticas y económicas que esto supone». Aun así, la experiencia ha sido gratificante: cada ejemplar vendido es verdaderamente suyo. Las ventas, por ahora, se concentran en redes sociales y en Amazon.
Alejandro Aquino continúa presentando ¿Qué toca hoy, Sócrates? en distintas ciudades del país. En Guadalajara puede encontrarse en librerías como Andanzas y Cervantes; en Ciudad de México, el autor planea colocarlo en más puntos en las próximas semanas. También está disponible en Amazon y puede solicitarse directamente a través de sus redes sociales.